Decepcionante

Sentirse como una verdadera gilipollas, aquello que parecía tan real y tan claro parece haberse esfumado. Nada tiene verdadero sentido, porque por todo lo que has luchado y todo lo que has conseguido no ha valido la pena. Sentirse engañada, lo has dejado todo y todo y ahora ya no te queda nada. De nada sirve llorar, las lágrimas no arreglan nada. Que la rabia te coma por dentro y de repente ZAS! un puñetazo a la puerta, sangre y dolor, pero nada te duele más que su mirada de desprecio o su no me importas. Tener una ganas de morirte que no las aguantas, pero lo que toca es ser fuerte y luchar por lo que quieras. Sin importar a quien haces daño o no.